Cobra fuerza llevar a Sued junto a Amable

Definido el panorama político nacional en lo que respecta a las candidaturas presidenciales, los amarres y cabildeos van ahora dirigidos a las nominaciones a la Vicepresidencia, un activismo que se siente con mayor fuerza en el PRSC.

Distintos sectores de ese partido promueven desde hace tiempo a José Enrique Sued, síndico de Santiago, como candidato vicepresidencial, lo que ha cobrado mayor fuerza ante el reiterado anuncio de Amable Aristy de que su compañero de boleta será un santiaguero.

Para muchos, Sued sería el candidato “natural” a la nominación, debido a sus altos niveles de aceptación tanto dentro como fuera del partido rojo. Además, nació, reside y hace vida política fundamentalmente en el Cibao, lo que constituye un valor agregado en momentos en que todos los candidatos presidenciales hacen grandes esfuerzos por conquistar al electorado de esa región.

La promoción del síndico de Santiago como el segundo en la boleta reformista se ha intensificado en los últimos días, básicamente en Santiago y otras demarcaciones de la región norte, aunque se cree que próximamente se extendería a otros puntos del país.

Vallas, letreros y cintillos en los periódicos regionales han comenzado a aparecer promoviendo la fórmula Amable-José Enrique. Entre los grupos promotores de este binomio se cita al movimiento El Cibao Puede, que preside el ex síndico de Santiago, Frank Muñoz Gil.

“Se trata del único síndico que ha podido repetir en la historia electoral del municipio de Santiago, y que ha sido síndico en tres ocasiones”, resaltó Muñoz Gil al juramentar a los coordinadores de su movimiento.

Sued, quien dirige la campaña del PRSC en su provincia y en el Cibao, es uno de los dirigentes más activos actualmente, supliendo en parte la ausencia de figuras del reformismo de esa importante región del país que han decidido abandonar las filas de la entidad política.

De hecho, la deserción más notoria que ha sufrido el partido rojo en los últimos meses fue la de Eduardo Estrella, ex senador de Santiago, quien no aceptó los resultados de las primarias de junio del año pasado y decidió formar el movimiento Dominicanos por el Cambio, que ahora forma parte de la Cuarta Vía. Otros reformistas del Cibao siguieron sus pasos, entre ellos los diputados santiagueros Ángel Acosta y Radhamés Fermín, mientras que figuras como Aney Muñoz le han negado su apoyo a Aristy.

Sued, a pesar de que tenía vínculos personales y políticos con Estrella, tan pronto pasaron las primarias dejó claramente establecido que trabajaría sin descanso por la candidatura de Aristy. En esa ocasión, proclamó que los verdaderos reformistas “ni se cambian ni se venden”.

El poder de Santiago

Amable Aristy, al igual que sus oponentes, le está dedicando mucho tiempo y recursos a Santiago, una plaza cuyo electorado vota por candidatos más que por partidos.

Prueba de ello es que en las elecciones legislativas y municipales los electores fraccionan y votan por un senador y un síndico, independientemente del partido al que pertenezcan.

Sued ha sido favorecido por ese fenómeno, ya que ganó la sindicatura en momentos en que su partido perdía en la provincia, primero del PRD y luego del PLD.

Un profeta en su tierra

Sued, nacido en 1948, ingresó al Partido Reformista en 1969 y desde entonces ha desarrollado una carrera exitosa, como lo demuestran sus triunfos en el municipio cabecera de la provincia Santiago.

Ha sido electo tres veces al frente de la sindicatura, dos de ellas de forma consecutiva. Su arraigo ha superado el de su propio partido, ya que ha ganado en el municipio en ocasiones en que el reformismo ha perdido en la provincia Santiago, primero del Partido Revolucionario Dominicano y luego del Partido de la Liberación Dominicana.