Un terremoto de 7,7 grados golpea a Perú; 72 muertos y al menos 680 heridos

LIMA (AFP) - Un fuerte y largo terremoto sacudió a Perú la noche del miércoles dejando 72 muertos y más de 680 heridos, según un nuevo balance difundido por el viceministro peruano de Salud, Jorge Calderón
Se trata aún de un balance provisional del violento sismo de 7,7 grados en la escala de Richter que estremeció a todo el país sudamericano, y afectó en gran medida a la sureña región de Ica, que fue declarada en estado de emergencia por el gobierno.


Calderón dijo que la situación es dramática en las ciudades de esa zona, especialmente Ica y Pisco, y llamó a los peruanos a expresar su solidaridad donando sangre para los numerosos heridos.


Un convoy sanitario con médicos y enfermeras partió en la medianoche del miércoles al jueves a esa región, a 300 km al sur de Lima.


El Instituto Sismológico de Perú ubicó el epicentro del terremoto, que se produjo el miércoles a las 18H41 locales (23H41 GMT), en el mar a 169 kilómetros al suroeste de Lima, con una profundidad de 47 kilómetros. La duración del sismo fue de unos dos minutos.


Ica -donde una iglesia se derrumbó-, Pisco, Chincha y otras ciudades del sur costero de Perú se hallaban totalmente colapsadas, sin comunicación terrestre y en penumbras por el corte de electricidad. Los pocos reportes de prensa disponibles señalan varias viviendas derrumbadas y, en general, un ambiente de destrucción.


Las autoridades pidieron inicialmente que el sector de La Punta, en el puerto del Callao -que sirve a Lima-, fuera evacuado por recomendación de la Marina, que detectó movimiento anormal de las olas del océano Pacífico y temía un tsunami.


Sin embargo otras autoridades señalaron que no había actividad anormal del mar, en sintonía con el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico, que había emitido previamente una alerta de tsunami, pero luego canceló su advertencia de maremoto para los países latinoamericanos sobre la costa del Pacífico.


El centro indicó que la alerta fue cancelada para todos los países mencionados en el reporte anterior: Perú, Chile, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Guatemala, El Salvador, México y Honduras.


El reporte inicial indicaba que no tenía constancia de que se haya generado un tsunami, y que la alerta se basaba "solamente en la evaluación del terremoto".


"Un terremoto de estas dimensiones tiene el potencial de generar un tsunami destructivo que puede golpear las zonas costeras cercanas al epicentro en minutos y a zonas más distantes en horas", agregaba.


El ministro de Salud peruano, Carlos Vallejo, señaló a través de la radio que se había decretado la alerta roja, la máxima emergencia.


El largo movimiento telúrico desató escenas de pánico en la capital peruana, además de roturas de vidrios y daños visibles en edificios. Las comunicaciones colapsaron aunque lentamente se iban restableciendo.


Después del sismo mayor se sintieron varias réplicas más leves -aunque algunas de más de 5 grados-, que se sintieron incluso en Ecuador, al norte de Perú.


Las autoridades hicieron un llamado a la calma. Según los informes preliminares varias personas han sufrido infartos o crisis de nervios.


El presidente peruano, Alan García, se dirigió al país y señaló, sin citar cifras, que "no hay afortunadamente un alto número de muertos para un evento de esta magnitud. Hay sectores duramente golpeados. Estamos recibiendo informaciones para tomar decisiones".


"En verdad la magnitud del evento ha sido muy grande. Mucha de la energía del movimiento se ha liberado y siguen a veces réplicas de baja intensidad por lo que pedimos serenidad", añadió.


El presidente también indicó que las clases escolares se suspenden para este jueves en precaución de los daños en las estructuras.

Una huelga médica que se había iniciado este miércoles de manera parcial fue suspendida para que todo el personal sanitario estuviera a disposición para la atención de esta emergencia.

Horas después de sucedido el terremoto, muchas personas continuaban en la calle y las escenas de pánico se sucedían. Varios edificios fueron evacuados como medida de seguridad, y en los principales distritos de Lima se veía cómo la gente recogía escombros por la cantidad de vidrios rotos y paredes dañadas, según comprobó la AFP.